Tim Burton: un musical pero sangriento, claro

Es la historia de una venganza. Y de cómo el odio consume a un hombre y a la vez lo hace seguir adelante hasta cumplir su cometido. Johnny Depp encarna al barbero Sweeney Todd en la última película del director Tim Burton, la adaptación del sangriento musical de Stephen Sondheim, que ayer se presentó en Londres y se estrenará en España el próximo 15 de febrero.

'Sweeney Todd: el barbero diabólico de la calle Fleet' se basa en una leyenda del Londres de principios del siglo XIX, para algunos un caso real, aunque los historiadores lo han desmentido. El filme aspira a cuatro Globos de Oro.

Cuenta la historia de un barbero feliz, profundamente enamorado de su esposa, que acaba injustamente encarcelado en Australia. A su regreso quince años después instala su negocio de barbero y materializa su venganza.

Es la primera vez que Johnny Depp canta en un musical: «Tim Burton es el único que me ha dejado hacerlo», bromea el actor, de 44 años, que tocó en un grupo de joven. Su voz podrá escucharse en España: dado que el 90% de la cinta es cantada, se proyectará en inglés con subtítulos.

Helena Bonham Carter, novia del director y madre de sus dos hijos, soñaba con el papel porque es una admiradora del musical de Sondheim, que se estrenó en Nueva York en 1979: «Le cantaba una de las canciones como nana a mi hijo Billy Ray».

La actriz pasó un 'casting' como cualquier otra. «No quería conseguir el papel porque me acuesto con el director». Johnny Depp, que ha rodado ya seis películas con Burton, se ha convertido en una musa para el autor de 'Eduardo Manostijeras'. «Son como hermanos», precisa Bonham Carter.

El rodaje no estuvo exento de retos. La actriz, que dio a luz en diciembre a su segundo hijo, descubrió que estaba embarazada en el plató. «No lo recomendaría. No podía tomar cafeína y empezábamos a rodar a las cinco de la mañana. Fue difícil especialmente cuando sufría náuseas». Además, el rodaje tuvo que ser interrumpido durante una semana porque la hija de ocho años de Johnny Depp fue ingresada de manera repentina por una enfermedad misteriosa, algo de lo que el actor prefirió no hablar en Londres.