Se encuentra Burton a las momias

Desde que era pequeño, Tim Burton era observado con preocupación por sus padres ya que le gustaba ver películas de terror y monstruos. De hecho, él mismo se siente aún ahora, de otro mundo.
Pero tiene más relación con México, como nadie se imagina. De hecho parte de sus ideas plasmadas en sus historias germinaron cuando conoció la tradición mexicana del Día de Muertos, a la que considera alegre, lejos de la oscuridad de Los Ángeles, donde vivía.
“Siempre respondí a esas imágenes, ese día es muy festivo, tiene mucho color, alegría. Creo que es una forma de ser positivo en la vida, todo eso te ayuda en ella”, expresó el realizador.
Burton, creador de El joven manos de tijera, entre otras cintas, ofreció ayer una conferencia magistral en el marco del 10 Festival Internacional Expresión en Corto, que se realiza en esta ciudad, y donde recibió un homenaje.
Horas antes, la madrugada del martes, realizó una visita rápida al museo de las clásicas momias del lugar, donde con asombro recorrió cada una de las salas que la conforman el museo.
“¡Ya las conocí, ya es una obsesión menos en mi vida!”, exclamó durante el encuentro con el público.
Y es que desde que radicaba en Los Ángeles, Burton era alguien que veía un canal de televisión plagado de cintas mexicanas.
“Había películas de luchadores, de monstruos mexicanos, de esas películas que se hacían en los Estudios Churubusco… La leyenda de la llorona fue muy importante para mí”, recordó.
Pero a pesar de ello, el realizador prefirió reservarse su opinión acerca de los actores y directores mexicanos, aunque estableció que conoce a Alfonso Cuarón (Y tu mamá también y Niños del hombre).
“(A los actores) Es difícil conocerlos, no sé cómo son, siempre traen máscara de luchadores (…) Y de directores no voy a contestar esa pregunta, no quiero causar una guerra aquí”, bromeó.
Claro, la respuesta fue en el mismo tono que unas horas antes, cuando se le rindió un homenaje en el cual recibió la Cruz de Plata por parte del festival y un diploma por el Sindicato de Trabajadores de Producción Cinematográfica y la Sociedad General de Escritores de México.
Ahí, el actor Luis Felipe Tovar le dijo que algún día le gustaría trabajar con él.
“Si intento hacer una historia sobre un vampiro, estén seguros de que vendré por él”, contestó Burton de buen humor, al momento de tomar el micrófono.
Lo que si aseguró, completamente en tono serio, fue que quien considera un renacimiento del cine mexicano, está equivocado.
“Siempre ha estado, lo que pasa es que la gente no lo había notado”, expresó.
Ayer, fue una hora entre Burton y su público. Entre el director que se disculpó con los organizadores al romper accidentalmente los audífonos en donde escuchaba la traducción español-ingles y los jóvenes entre las cuales se encontró una de 18 años a quien le cumplió su deseo de tomarse una fotografía sobre el escenario.
Entre el Burton que se protegía de la luz con su mano para ver a su interlocutor y aquellos adolescentes que le regalaron una figura en papel maché de él mismo.
Fue el cineasta y su visión de sí mismo:
“No me sorprendería si (yo) fuera de otro planeta, creo que todos son unos alienígenas, claro, excepto aquí (Guanajuato)”, sonrió.
Tim Burton, realizador de cintas como El cadáver de la novia y El extraño mundo de Jack, está en México desde la mitad de la semana.